Llenar de vida los espacios del hogar con plantas es cada vez más frecuente. Sin embargo, estas también requieren de cuidados, aunque se encuentren en el interior. En este marco, la llegada de las bajas temperaturas es uno de los momentos donde más protección demandan. Lucía Lanza, emprendedora detrás de Selva, junto a Sofía Lanza, brinda algunas recomendaciones.
- Su metabolismo baja, por lo que hay que disminuir el riego a 1 vez por semana. No tengas miedo de regar menos tus plantas de interior, ellas necesitan descansar de la temporada de verano en la que crecen, florecen y tienen una gran actividad metabólica.
- Alejar de los calefactores. El exceso de calor que emanan los calefactores o radiadores (o losa radiante) puede deshidratar las plantas o desmejorarlas, inclusive quemar las hojas.
- Ventilar ambientes. La brisa que entra por las ventanas en espacios ventilados es una gran ayuda para evitar que nuestras plantas contraigan plagas y enfermedades.
- Control de plagas. Sugerimos colocar aceite de neem y jabón potásico cada 15 días como prevención de plagas y enfermedades en general.
- Atención con la cantidad de luz y de sol directo que reciben nuestras plantas. Incluso, quizá necesiten ser movidas de lugar por este aspecto. Con el cambio de estación el sol se mueve y el rincón que parecía perfecto en verano, en invierno puede ya no serlo.

BONUS: Usar humidificador y fertilizar.
La falta de humedad ambiente en invierno y sobre todo en Córdoba que es una Provincia muy seca, no es favorable, generalmente para nuestras plantas de interior.
Aconsejamos, entonces que humidifiques las hojas con un rociador o que uses humidificador de ambientes.
Con respecto a la fertilización, es recomendable fertilizar tus plantas cada 6 meses aproximadamente. Puede ser con lombricompuesto o con la borra del café, que aporta nitrógeno al sustrato.
