Dar el paso de mudarse no es tarea fácil. Mucho menos si implica cambiar de lugar de residencia, dejando atrás amigos, familia, costumbres y también comodidades. Sin embargo, es una realidad que miles de jóvenes eligen atravesar en busca de sus sueños, ya sea para estudiar o trabajar lejos del hogar. Tal es el caso de Ayelén Bastianelli, quien dejó Villa Carlos Paz para trasladarse a Buenos Aires en busca de oportunidades.
Y fue en medio del caos que implica acostumbrarse a una nueva vida, en una nueva ciudad, que encontró la fórmula para despegar en redes sociales. La bailarina y modelo inició su camino en el ámbito digital a través de TikTok, cuando aún residía en la docta y contaba con alrededor de 90 mil seguidores.
Sin embargo, no fue hasta desembarcar en Buenos Aires que llegó el éxito, esta vez en su cuenta de Instagram. Apelando a la identificación, eligió mostrar el detalle de su travesía en la Capital nacional. Así, logró cosechar en poco más de un mes 57 mil seguidores que la acompañan día a día.
“Me pareció que la mudanza era un momento para animarme a más, a hablar en Instagram, por ejemplo, algo que antes no hacía porque tenía el prejuicio de pensar qué dirían los que me conocen”, señala en diálogo con Ocio.
Y sigue: “La gente se reía de que llegué y no tenía sábanas, ni acolchado, nada, estaba todo el departamento vacío y a muchos del interior les pasa lo mismo”.
En este marco, revela que su impronta tiene que ver con “alejarse de la perfección que muchas veces se ve” en las plataformas.
“Me expongo sin filtro a mí y a las cosas malas que me pasan, como cuando me pierdo andando”, dice al respecto y cuenta, entre risas, que el mayor desafío al que se enfrenta a diario es ubicarse en la Capital.
Gran ciudad, gran industria
Acerca del rubro artístico en la Capital evalúa que es de “otra magnitud” comparada con su Córdoba natal. Reconoce también que la competencia es mayor y admite: “Sos una hormiguita entre un millón”.
“Hay muchas personas haciendo lo mismo que uno –reflexiona-, mucho talento, famosos y demasiado de todo”. No obstante, lejos de apabullarse, Bastianelli toma clases para perfeccionarse en la danza, disciplina a la que se dedica desde hace tiempo.
En esta línea, revela que su especialidad es el clásico y el contemporáneo, pero planea sumergirse en el género urbano.
A su vez, pretende incursionar en el teatro y su mayor objetivo hoy por hoy es trabajar en una obra musical. “Y estudiaría canto para reforzar”, finaliza.