Atendiendo a la inflación actual que rige en Argentina -que según un informe del banco estadounidense JP Morgan llegaría al 60% en enero- contar con estrategias para un oportuno manejo financiero es esencial.
Al respecto, Celeste Sánchez, quien está detrás de Dinero en Orden, sostuvo: “Pasado febrero, luego ese número bajaría a 20% hasta junio y después seguiría descendiendo. Es una estimación, no sabemos si se va a dar exactamente de esta forma pero sí es una certeza que habrá aumentos”.
Así, remarcó la importancia de los presupuestos de economía familiar para tener una planificación y afrontar de la mejor manera los próximos meses. Sobre la herramienta, detalló: “Es básicamente una lista que, por un lado tiene los ingresos y, por otro, los gastos”.
“Entonces, en principio es útil contar los recibos de sueldo o, en caso de ser monotributista o tener comercios anotar mes a mes lo que entra. Luego, hay que dividir los gastos en fijos y variables”, prosiguió.
Los primeros son aquellos con un monto determinado a abonar todos los meses necesariamente, como luz, gas, internet, entre otros. “Esos que generan deuda o que son un compromiso como la cuota del gimnasio o el colegio”, detalló la comunicadora. En tanto, los segundos “son esos que se realizan en función de la plata disponible en el mes -señaló Sanchez- como comida o salidas”.
Posteriormente a la confección del listado, es momento de analizar y Celeste aclaró: “Esto sirve para ver en qué se va la plata que mucha gente no lo sabe”. Y remarcó: “No es la idea que quede ahí, sino ver si los consumos fueron acordes al dinero disponible y en caso de que no, ver cómo ajustar”.
En este sentido, indicó que “lo ideal al hacer un presupuesto es que de 0, es decir, gastar lo mismo que uno gana, o sea que no sobra pero no te falta”. A su vez, dijo que dicha planificación debe considerar la suba de precios.
“Si destinamos un mes 60 mil pesos, por ejemplo, al supermercado, tenemos que sumarle aproximadamente 25% más al calculo del mes siguiente, o sea pasar a tener en cuenta 75 mil, que puedo separarlos apenas cobro o tratar de juntar ese monto al momento de ir a comprar”, recomendó.
Ahorrar: ¿Utopía o posibilidad?
Tras acatar las sugerencias de la profesional para el presupuesto y obtener los resultados esperados, el paso siguiente es apuntar al ahorro. Celeste aseguró que “se puede, más allá del contexto”. Y profundizó: “Guardar pesos no sirve pero sí motiva”.
“Una vez que nuestro presupuesto da 0, hay que buscar cómo hacer que te quede algo, así sean 10 o 1000 pesos (lo que es posible ganando más o gastando menos) y eso hay que incluirlo dentro de los gastos, en un apartado, para después invertirlo, comprar acciones, bonos, lo que sea”, aconsejó.
También, añadió: “Igual que destinas plata al alquiler, pones ‘ahorro’ y, personalmente, invito a participar de Fondos Comunes de Inversión (FCI) que cualquier persona bancarizada los tiene y se necesita tan poco como 1000 pesos. Hoy, básicamente es evitar ir al kiosko y posibilita un cambio sin sacrificarse demasiado”.
Finalmente, Sánchez desestimó la utilización de tarjetas de crédito: “Nunca es recomendable recurrir a estas porque es una deuda de lo que no podés escapar y actualmente el costo de vida es muy alto como para encima sumarle eso”.