No se me ocurre trabajo más difícil física, mental y emocionalmente que el de buscar la
perfección de una bailarina de ballet. Y sobre esto va Girl, que ganó el premio a mejor ópera prima para el director belga Lucas Dhont en el último festival de Cannes. La película, basada en una historia real, narra la vida de Lara, una joven transgénero que lucha para convertirse en bailarina de ballet clásico. Un drama muy potente, elegante y sensible que, para respetar la versión original que se presentó en Cannes, no recibió ningún tipo de corte o edición. De las pocas propuestas que muestran el sacrificio que la danza significa y no le teme a meterse con inteligencia y elegancia en el mundo personal de una identidad trans.
De la cocina familiar a una marca en expansión: la historia de Godere, sabor hecho empresa
Emprender no siempre empieza con un plan. A veces, comienza con una cocina prestada, algunas ganas compartidas y la certeza de que se puede vivir haciendo lo que se ama. Así nació Godere, el proyecto gastronómico de la...