Ediciones Digitales
Candela Salazar, una influencer de 27 años, fue detenida durante un operativo coordinado entre la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) y el Departamento de Delitos Económicos en el Aeropuerto Internacional de Córdoba.
La joven estaba a bordo de un avión por despegar y en ese marco, se la hizo descender y se le informó sobre la acusación que pesa sobre su contra para luego trasladarla a una dependencia policial. Está acusada de “estafas reiteradas” junto con un supuesto cómplice, Nicolás Gionco. A ambos se los responsabiliza por engañar a varias personas -hay cuatro denuncias en la Justicia- desde el año 2022 al hacerles creer que mediante inversiones de dinero podían obtener el pago de intereses mensuales en dólares, alrededor de un 10% o 12%.
Según las primeras informaciones que surgieron de la investigación, al parecer Gionco, también de 27 años, captaba a clientes en un gimnasio y les contaba sobre las supuestas habilidades de Salazar con las inversiones y luego tenían una reunión con ella.
Las maniobras fraudulentas que desembocaron en las denuncias están estimadas en un prejuicio patrimonial de US$22.900, cerca de $27 millones. La Justicia no descarta que esa cifra aumente ante la posibilidad de que aparezcan más casos. Está previsto que los dos detenidos sean trasladados en los próximos días a la fiscalía, a cargo de Lourdes Quagliatti, que interviene para declaración indagatoria.
Quién es Candela Salazar
Se describe como “nómada digital”. “Te ayudo a transformar tu vida por completo y convertirte en nómade digital”, dice su presentación en Instagram.
De esta manera, dice ser capacitadora, motivadora y persona de habilidades para los negocios y tiene una página web donde vende varios de sus servicios. Entre ellos, un curso para monetizar redes sociales y otro de marketing digital -con habilitación de reventa- para empezar un negocio.
“Viví muchos años en función de otras personas, llenando las expectativas de otros y nunca las mías. Hasta que quedé vacía. Trabajar en mí me cambió la vida. Cambié todos mis hábitos, mi mentalidad, leí muchos libros y tomé decisiones donde el primer paso fue priorizarme. Dejar mi trabajo y comenzar a emprender me llevó a un camino de evolución de todos los días que comparto acá para ayudar a sanar y brillar”, narra en su cuenta, donde además pueden verse sus viajes por el mundo.
En uno de sus posteos recomienda unirse a sus cursos de marketing. “Yo también estaba ya cansada de ver a tanta gente haciendo tanto dinero gracias al Marketing Digital y llegar a cuestionarme si podía ser real o no. Así que decidí probarlo y salirme de la duda…Y para mi sorpresa…¡Siii se puede ganar dinero digitalmente incluso sin tener experiencia y estando hasta dormida! Aprendí las habilidades necesarias y automaticé mi negocio. Esto me permite ser libre y organizar mi tiempo como desee. Las herramientas que necesitas son fáciles de aprender”, publicó.
En tanto, de su vida personal el único dato que se conoce de su familia es que su padre es Sebastián Salazar, un piloto de rally -carreras automovilísticas- y dueño de un taller mecánico.
