Contouring en inglés significa contorno, un esquema que se utiliza para limitar algo. El término en el contexto del uso del maquillaje (para definir pómulos, mandíbula y nariz), crea verdaderas ilusiones ópticas, puede también aplicarse al cabello.
El Hair Contouring no pretende reemplazar sino reforzar su uso junto al make up y tiene como objetivo resaltar y corregir las facciones, con la colorimetría. Gracias a este recurso, que juega con luces y sombras meticulosamente colocadas, el color del pelo se redefine para sacar lo mejor de nosotras y esculpir nuestra cara.
Actrices, celebrities, instagrammers, se siguen sumando a esta moda que, en realidad, es una técnica legendaria que fue cambiando de nombre a través de los años. El Hair Contouring es lo que hace tiempo aplican los estilistas visagistas con el nombre de balayage, que consiste en barrer el color para obtener claros de una forma natural y así iluminar el rostro.
Ahora, la diferencia radica en definir estratégicamente las zonas dónde realizar estos oscuros o decoloraciones. Para definir, estilizar y armonizar el rostro, lo primordial consiste en reconocer el tipo de cara y color de base que tiene la clienta, para así luego encontrar el equilibrio y color adecuado para jugar con tonos claros, medios y oscuros a lo largo de la melena.
Uno de los mayores beneficios de este estilo de coloración es que, debido a la variedad de tonos, se pueden dejar las raíces sin teñir por más tiempo… y esto ¡es genial!
A tener en cuenta: para poder realizar esta técnica con éxito, es necesario tener buena calidad y cantidad de cabello, ya que en la mayoría de los casos es necesario realizar varias decoloraciones para lograr iluminar de una manera acertada.
En los casos de pelo escaso o fino, a no desesperar. Una forma de recrear el hair contouring consiste en colocar extensiones claras y oscuras y, de este modo, no solo armonizar el rostro sino también cuidar del pelo y darle volumen extra.
Insisto en que a esto lo debe realizar un profesional estilista idóneo, con criterio y que entienda muy bien sobre morfología, fisiología, colorimetría y salud del cabello.
Tipos de rostro
Rostro ovalado: se adaptan la mayoría de estilos y colores, es básicamente la forma perfecta, en la cual añadir profundidad, textura y brillo al cabello es más fácil.
Rostro redondo: lo ideal es aplicar alrededor de la línea que va de oreja a oreja, tonos más claros y en largos, colocar un tono más oscuro por debajo de las orejas, así se logrará iluminar y alargar la cara, disimulando su redondez.
Rostro cuadrado: al ser rasgos más amplios, lo ideal son las capas multitonales de luz y oscuridad, con mayor intensidad alrededor de la línea de la mandíbula. Esto hará suavizar su forma.
Rostro triángulo invertido: al tener mentón estrecho, se debería crear en el sector de la mandíbula una coloración clara, para suavizar la mitad inferior del rostro.
Experta consultada: Marcela Nadaya