“La capacidad de adaptación favorece el liderazgo femenino en esta era digital”
La especialista considera que esta ‘learnhability’ de las mujeres será la clave para que sostengan y amplíen su protagonismo en el ámbito laboral. A su vez, la flexibilidad y empatía son ‘el as en la manga’ para el empoderamiento femenino. La radiografía laboral actual y los desafíos venideros para las mujeres referentes en los tiempos digitales.
Por Sol Aguirre/ tw: sol_aguirre
¿Cuál es tu visión sobre el posicionamiento de la mujer en el futuro laboral?
– Desde Manpower lo que nosotros vemos es que la mujer tiene muchas oportunidades de ocupar altos cargos jerárquicos. En la actualidad ya está avanzando hacia posiciones importantes, pero aún al 95% de las posiciones de altos directivos lo ocupan hombres.
Ese dato nos da cuenta que si bien ganamos protagonismo en la vida organizacional, todavía nos falta seguir ocupando espacios de poder.
¿Qué evaluación hacés sobre el liderazgo femenino en Córdoba?
– Córdoba es una provincia que constantemente tiene aperturas al cambio. La equidad de género es un tema de agenda, que en la actualidad se está discutiendo en las organizaciones en general y también a nivel local. Sin embargo, veo necesario que los líderes propongan políticas concretas, para poder ir aumentando el porcentaje de participación de la mujer adentro de las empresas e instituciones locales y, obviamente, esto se tiene que dar también a nivel nacional.
¿Cuál es el valor agregado que las mujeres pueden sumar en el trabajo?
– Las mujeres, hoy en día, estamos formadas, hacemos desarrollo de competencias y contamos con muchas fortalezas que las organizaciones pueden aprovechar; competencias blandas, que se complementan de manera muy enriquecedora con las competencias más propias de los hombres. Entiendo que podemos articular un buen equipo, para dar respuesta a los desafíos que presenta el mundo del trabajo de aquí en adelante: somos más flexibles ante un futuro cambiante, incierto, que avanza hacia el desarrollo de la inteligencia artificial, de la automatización. Pero, sin dudas, estos recursos tecnológicos no van a poder reemplazar a aquellas competencias específicas y particularmente femeninas, como son la empatía, la interpretación de la comunicación, darle propósito y sentido a las acciones, poder entender y atender a la posición del otro. Todas estas son características centrales e irremplazables para el desempeño y el liderazgo laboral.
¿Qué particularidades tienen los liderazgos femeninos?
– La mujer tiene muy buena capacidad de organización, de poder llevar a cabo varias tareas en forma simultánea y esto está comprobado inclusive desde la neuropsicología: se explica porque entre los hemisferios derecho e izquierdo, tenemos muchas más conexiones neuronales que los hombres y eso hace que contemos con una enorme capacidad para asumir diferentes tareas al mismo tiempo, ordenarlas, establecer prioridades. Además, para los liderazgos laborales las características mencionadas antes como propias de las mujeres, también enriquecen los liderazgos femeninos.
¿De qué manera el avance de lo digital está modificando los liderazgos?
– El cambio que se está produciendo a nivel global invita a las organizaciones, fundamentalmente, a ir hacia otra manera de hacer el trabajo. Los recursos digitales son grandes aliados de la innovación, de la creatividad y se estima que si bien va a haber muchas posiciones que van a ocupar los robots, va a haber nuevos puestos de trabajo que se van a ir creando en función de estos cambios. El desarrollo tecnológico es un hecho, se está desarrollando, pero va a cobrar cada vez más protagonismo en la década venidera.
¿Cuál es el protagonismo que considerás que deberán tener las mujeres en esta era digital?
– Para lograr posiciones de liderazgo, es fundamental que las mujeres podamos seguir
formándonos en todo lo que tiene que ver con recursos tecnológicos fundamentalmente y
desarrollar lo que en Manpower llamamos la learnhability. Esta capacidad, la de aprender en forma constante, será fundamental porque este cambio tan contundente va a ser la constante en el mundo laboral futuro, para estar desaprendiendo lo que conocemos y aprendiendo lo nuevo. Esa flexibilidad, esa apertura hacia el nuevo conocimiento, va a ser la clave determinante para poder ocupar posiciones y las mujeres, por naturaleza, tenemos incorporada esa capacidad de adaptación que favorece el liderazgo femenino en el ámbito laboral y en la era digital presente y futura.
A su vez, el mundo laboral tiende a romper con procesos rígidos, al trabajo por resultados y es fundamental que las mujeres tengamos espacios de trabajo más amigables para poder mantener un buen equilibrio entre nuestra vida personal, familiar y laboral.
En este sentido, el cambio que se produce a nivel global es favorecedor para nuestra inserción y desarrollo dentro de las empresas. Hay una conciencia general mucho mayor acerca de la equidad de género y este punto también es altamente positivo para nuestro desarrollo de carrera.
¿Cuáles son los rubros en los que las mujeres han ganado posiciones de liderazgo?
– Las mujeres claramente hemos ido ocupando posiciones en rubros en los que antes tenían protagonismo mayoritario los hombres. Hay muchas mujeres ingenieras que están trabajando en la industria, mujeres que provienen del rubro IT que también se incorporan en puestos de alto rendimiento. Rubros que eran altamente masculinos, están dando apertura al ingreso de la mujer, inclusive dentro de la construcción, en el marco de la planificación, el diseño y la investigación para ese ámbito.
Mencionabas la equidad de género. ¿Cuál considerás que es la clave para que en los equipos de trabajo y en los liderazgos esa equidad se haga efectiva?
– Es muy importante, por ejemplo, para poder hacer desarrollo de carrera, generar una red de contactos con pares femeninos. También es necesario que abramos nuestra red de apoyo para poder contar con impulsores de nuestro desarrollo de carrera, que la abramos hacia la participación de hombres influyentes en las compañías que identifican nuestro potencial y que nos ayudan a visibilizarlo.
A su vez, es fundamental el empoderamiento propio: tomar conciencia de nuestras capacidades, de la preparación, de la responsabilidad que tenemos con respecto al trabajo, convencernos a nosotras mismas de nuestras competencias, para poder mostrarlas en el ámbito laboral en el que nos encontremos. A partir de ello, otra cuestión importante para quienes tienen ambición de liderazgo es aspirar a ocupar las posiciones donde entran en juego la toma de decisiones.
“Es fundamental el empoderamiento propio: tomar conciencia de nuestras capacidades, de la preparación, de la responsabilidad que tenemos con respecto al trabajo, convencernos a nosotras mismas de nuestras competencias para poder mostrarlas en el ámbito laboral en el que nos encontremos. A partir de ello, aspirar a ocupar las posiciones donde entran en juego la toma de decisiones”