Natalia Jiménez Delseri: “LOGRÉ QUE ME IDENTIFIQUEN COMO DISEÑADORA”

Una mujer que encara la vida ejercitando la felicidad, el amor y el esfuerzo. Así se define ella, Nati Jiménez, conocida por su gran desempeño a la hora de diseñar vestidos de gala, desde su marca propia ´Natalia Jiménez Collection´. Cordobesa de pura sepa, hija del mandamás ´La Mona Jiménez´, hoy con tan solo 37 años es la cara visible de su propia firma de vestidos confeccionados a medida y de su nueva marca NJ, que nació a raíz de la pandemia con una propuesta diferente de prendas urbanas. Con grandes valores fundados por su mamá, a quien describe como una ‘leona ‘, hoy Nati conformó junto a su esposo Daniel y sus dos hijas Paloma (16) y Maria Luz (12) una familia superunida.

Por. Candelaria Lanzaco
PH. Federico Rodriguez B.
Make Up. Mariana Ruggieri
Pelo. JTORRES Peluquería
Redes. Candelaria Carretero
Modelo: Celina Villalobos
Locación. Natalia Jiménez Collection

“Mi gran pasión es la moda. Me inspira arrancar mi día bien temprano, no perder el tiempo y que la vida no se lleve tiempo perdido. Mi sueño, puedo decir que se cumplió cuando formé mi hermosa familia y construí mi local propio, con una marca que me identifica mucho. Pero ese sueño sigue creciendo todos los días con cada logro nuevo de mis hijas, mío y de mi marca”, afirma Nati.

Vamos años atrás, contanos, ¿cómo comenzó Natalia Jiménez Collection? El hecho de que tu mamá confeccionaba los trajes de tu papá, ¿influyó en tu decisión? Hoy, viendo el crecimiento de la marca, ¿qué te genera? ¿Te emociona?

Natalia Jiménez Collection es solo un pedacito de mi historia. Todo comenzó a mis 16 años estudiando junto a Angelina ‘Corte y Confección’, mientras cursaba el secundario. A los 17 años armé un taller en el quincho de mi casa y creamos junto a Lore, mi hermana, la marca de Las Jiménez’, en Castagnino. Fué una marca con moda muy alternativa, muy under. Confecciones con telas comunes y materiales innovadores que traíamos de cada viaje que hacíamos con mi familia. En 2005, ya casada y mamá de Paloma, abrí el local ‘Natalia Jiménez Collection’ en Av. Rafael Núñez con una línea de alta costura, confecciones a medida, trabajando con un taller propio, ya más grande. Finalmente, en 2019 pude abrir un local propio que construí especialmente para mi marca, pensando en un espacio totalmente de moda sobre Luis de Tejeda. Mi mamá influyó mucho en mi vida. Desde chica ella confeccionaba los trajes de mi papá en el garaje de casa. Yo también la acompañaba a comprar telas, insumos y veía todo ese mundo de la moda.

Hablando de tu mamá, una mujer con todas las letras y madre intocable, ¿qué marcó ella en vos? ¿Cuáles son sus principales valores que destacas? ¿Y en tu maternidad?

Mi mamá me enseñó los valores de la vida, la importancia de luchar por la familia y que el amor y la unión entre nosotros es lo más importante. La admiro mucho, mi mamá es mi ejemplo de mujer a seguir, de empoderamiento, lucha constante. Ella creyó siempre en mi carrera, fue la que más me aconsejó y me empujo con el “vos podés”. Mis principales valores de la maternidad son la compañía, la confianza y el amor. Es fundamental para mí acompañar a mis hijas en todo, creer en sus proyectos e ideas. Me considero una mamá superpresente y compañera de mis hijas, tal como lo fué mi mamá conmigo, una leona.

Y tu papá, un icono de la música, desde tu nacimiento él ya era famoso, ¿qué significó para vos ser la hija de ‘La Mona’? ¿Cómo viviste esto en tu infancia? ¿Te pesaba, lo disfrutaste?

Cuando nací, mi papá ya era la Mona Jiménez, con todo lo que eso implica. No fue tan fácil, porque en su momento su música era un tanto discriminada, eso costó mucho. Pero hoy, después de ver mucha agua pasar, con la edad que tengo, ya más adulta y viendo a dónde él hizo llegar el cuarteto, simplemente tengo admiración plena por su persona, la familia que tiene, la relación con sus fanáticos y su energía plena.

Hace algunos años tu papá estuvo internado en grave estado, ¿qué sentiste en ese momento? ¿Qué pasó por tu cabeza?

Mi papá estuvo internado hace dos años atrás por una neumonía bilateral y sentí mucho miedo y angustia. Mis viejos significan mucho para mí. Creímos y rezamos mucho para que saliera adelante y no solo salió sino que retomó sus actividades y el baile con más ganas que antes. Es una persona admirable e increíble.

Instagram, un lugar donde ponés toda la buena onda y amor. ¿Qué te genera este ida y vuelta? ¿Sos consciente de la influencia que generás en tus seguidores?

Instagram fué una puertita pequeña que de a poquito fui abriendo para que la gente me vaya conociendo en mi día a día. Y sin pensarlo, creció mucho en seguidores y permitió que me descubran y me identifiquen como Nati Jiménez, una diseñadora cordobesa y ya no como ‘la hija de la mona’. Este camino del reconocimiento lo construí y luché muchísimos años. Siento orgullo de ser hija de La Mona, pero también me genera mucha felicidad ganarme un espacio haciendo lo que amo. Las redes también me permitieron ampliar mi marca a todo el país. Hoy trabajo con muchas clientas de La Rioja, Corrientes, San Luis y Rio Negro, entre otras.

En instagram no me siento como una influencia para nada. Sí es real que exponiendo mi vida, mis decisiones, eligiendo actividades que me gustan o no, hacer género en la gente, que puedan comenzar también a decidir o a accionar. Mi vida es un constante ejercicio de felicidad. La felicidad se ejercita y eso es lo que me gusta mostrar a quienes eligen verme. El ida y vuelta con mis seguidores es muy sano y me contagian también a mí con buenas energías. Casi no tengo haters y eso habla mucho de la linda energía que nos transmitimos mutuamente a través de la pantalla.

Desde afuera te vemos como una mujer fuerte, valiente y con mucho amor, ¿te gusta la mujer en la que te convertiste? ¿Que autoreconocimiento te hacés como mujer?
Me siento una mujer segura, sé lo que quiero y a dónde me dirijo. Me gusta plantearme metas claras. Me gusta mucho la mujer que soy. Para nada perfecta, pero de eso se trata, de mejorar constantemente y confiar en una misma. Me autoreconozco como alguien valiente, segura y decidida. ¡Que encara y avanza!

En el contexto que estamos viviendo, ¿cómo pasaron estos meses los Jiménez? ¿Y vos como diseñadora? Nació NJ, una nueva propuesta dentro de tu colección, más cómoda y urbana, ¿cómo fue el cambio?

En el contexto de covid, mi familia se cuidó mucho y se sigue cuidando para proteger a mis viejos sobre todo. Mi empresa se paró. Los vestidos de fiesta fueron uno de los rubros más complicados ya que directamente no se vendían. Pasado el mes y medio de cuarentena estricta, decidí arrancar con cubrebocas. No solo por mí, sino por mis empleados, modistas, talleres, mis chicas del local. El lanzamiento de los cubrebocas fue un gran éxito y funcionó tan bien que empecé a pensar en una tienda online porque Instagram colapsaba. Al abrir la tienda online me dieron ganas de ofrecer más productos y me planteé la idea de diseñar ropa para estar en casa. Así surgieron los primeros conjuntos deportivos con mi toque de glam de tachas, perlas y detalles que los hicieron distintos. Confeccionamos después algunos vestidos también de día y así de a poquito fui pensando en lo que dos meses más tarde comenzó a ser la Línea NJ by Nati Jiménez, que hoy es otra marca y próximamente será otro local. En ese sentido, la pandemia y el reinventarme abrió puertas a algo nuevo y diferente que me encanta.

¡Mis clientas se coparon mucho! Cuando diseño las prendas, pienso en crear prendas únicas, finas, pero sobre todo diferentes a lo que uno encuentra en cualquier tienda. Y ahora con el tema de la pandemia un poco más flexible, afronto el desafío de manejar dos marcas al mismo tiempo, ya que el Collection con sus vestidos de fiesta volvió a explotar con egresadas, novias, quinceañeras y madrinas. Por otro lado, mis viejos siguen descansando. Les vino muy bien a los dos este descanso obligatorio para poder disfrutar de otras actividades y compartir más en familia.