El tratamiento de la diabetes consiste en controlar los niveles de glucosa por medio de la dieta, tomar los medicamentos y en algunos casos aplicarse insulina. Pero a su vez, se basa en la salud mental de cada persona. El estado de ánimo, las emociones, los sentimientos y todo lo que sucede en nuestra mente está directamente relacionado con la producción de hormonas que intervienen en el control o descontrol de la glucosa.
El estrés es un gran ejemplo, es algo natural en los seres humanos, ya que actúa como defensa ante una amenaza, ya sea real o mental. Sin embargo, aunque sea un mecanismo de defensa natural, a largo plazo afecta a la salud, ya que puede elevar los niveles de glucosa y con esto afectar el control de la diabetes.
Con la situación mundial actual, se ha valorado más la importancia de la salud física y mental. Las personas comenzaron a tener más cuidados y ha servido para que se informen y eduquen sobre el tema, para así lograr una concientización y sensibilización ante las posibles enfermedades como la diabetes.
Tener la diabetes bajo control permite al paciente disfrutar y mantener una excelente calidad de vida, además de contribuir a su bienestar de salud general.
Es importante proponerse propósitos y comprometerse a cumplirlos, para llevar una calidad de vida sana y así evitar situaciones de estrés que perjudiquen la salud. Se recomienda que las personas que viven con diabetes lleven su tratamiento siempre de la mano de su médico tratante y equipo de profesionales de la salud. También, llevar un control constante de su glucosa, alimentación y ejercicio. Es la manera de vivir lo más saludablemente posible.
A modo de cierre, es necesaria la educación en el tema, tanto del paciente como de su entorno, para poder realizar las mejores prácticas que beneficien su bienestar. Es importante tener la motivación de mejorar la salud y sostener ese propósito para poder disfrutar de una excelente calidad de vida.