Ediciones Digitales
La última luna llena del año tendrá lugar el próximo domingo 15 de diciembre y en este caso estará acompañada por Mercurio que deja su movimiento retrógrado. Así, se nos habla de revisiones finales, ofrece mayor visibilidad a las temáticas de una etapa que inició hace seis meses.
¿Qué estabas pensando o qué sucedía en tu vida cerca del 6 de junio de 2024, cuando hubo Luna nueva en Géminis? Una mirada al pasado, ver dónde estamos ahora con respecto a esos momentos, nos da la perspectiva necesaria para seguir adelante con el aprendizaje cumplido.
De esta manera, se nos invita colectivamente a encontrar nuestra propia verdad y comprender qué necesitamos aprender a comunicarnos de una forma más alineada con lo que realmente somos en el fondo, para así liberarnos de convenciones erróneas.
¿Qué rituales hacer con la última Luna Llena del 2024 en el signo de Géminis?:
Según un estudio la Universidad de Harvard, los rituales pueden ayudarnos a liberarnos de la ansiedad. Hace unos años, Francesca Gino, profesora asociada de la escuela de negocios de Harvard y autora del estudio “Rituals Alleviate Grieving for Loved Ones, Lovers, and Lotteries” expresaba públicamente que la mayoría de las personas, sean o no supersticiosas, cuentan con rituales para apoyarse en los momentos de estrés o ansiedad.
Para este ritual necesitás un par de velas de cualquier color, hilo, tijeras y las flores que sean de tu agrado.
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Elegí una habitación o sitio tranquilo de tu casa. Es importante que estés sola y libre de distracciones.
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Cuando estés lista juntá las dos velas con ayuda del hilo. Una vez juntas, prendelas con un fósforo.
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Tomá las flores con tus manos y pensá en el ciclo que deseas cerrar: puede ser liberarte de un desamor, de una experiencia traumática en el trabajo o con una amiga, o alguna situación familiar que deseas soltar.
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Llegado este momento deberás repetir (en voz alta o baja, como prefieras) la siguiente frase: “Yo (decís tu nombre) me libero de las cadenas del pasado, suelto todo lo que me hace daño, perdono a todo aquel que me hizo daño y me perdono a mí misma por haberlo permitido. Dejo atrás cualquier sentimiento de culpa, de rabia, de miedo o de tristeza, agradezco por lo que viví y me preparo para avanzar poco a poco en el camino de mi vida. Que así sea”.
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Con las tijeras ahora cortás el hilo que une a las velas y esperás a que se consuman por completo.
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Colocá las flores en un jarrón con agua y al día siguiente llevalas al agua más cercana (río, arroyo, lago, mar) y dejá que se vayan.
