¿Cómo nació BLIND TM? ¿Qué te movilizó para comenzar este proyecto?
Elegí crear Blind, como parte de un camino de realización personal. Ser fun de las fragancias no me alcanzaba, quería ser protagonista en el mundo creativo de los aromas. Así que me inscribí en un curso de perfumería, en la Asociación Argentina de Químicos Cosméticos, para adquirir conocimientos técnicos. En paralelo investigué mucho el mercado de fragancias de autor, y me convencí de que yo también podía crear una propuesta de fragancias totalmente originales y súper premium, para un público que busca permanentemente referenciarse de manera exclusiva. Una parte de las personas, que siempre está a la caza de cosas nuevas, con diseño y de mucha calidad.
El nombre Blind -ciego en inglés-, es para abrirle el camino al olfato porque trabajamos con aromas, en un mundo plagado de estímulos visuales. Pero también dejarle lugar a los otro sentidos, como el tacto, por lo cual trabajamos con el braille en la comunicación de nuestro packaging, y al oído, linkeando una fragancia con un ritmo latinoamericano, a través del nombre de cada perfume. Desde Blind tenemos como objetivo abrirle camino en el mercado a la categoría de la perfumería de autor, y ser referente creativo para este público.
En este mes especial donde se busca igualdad, se habla del concepto de género, estereotipos y muchas cosas más… ¿Sentís que tu marca se identifica o va por otro lado la búsqueda?
Más allá de un mes particular, creo que hay un cambio de paradigma y la sociedad y los consumidores se están replanteando cuestiones de diversidad y género. Es algo positivo que estamos viviendo todos juntos. Para mi, las fragancias son una herramienta para expresarnos, y construir aquello que deseamos que la mirada del otro destaque. Inferir características de una persona, en función de los aromas que escoge es una tarea individual. Desde Blind no buscamos categorizar o estandarizar a las personas. Creemos que cada uno elige las notas que le gustan libremente, buscamos romper con las convenciones de la tradición en perfumería: así como no hay colores de mujer o de hombre, tampoco hay notas femeninas o masculinas.