María Cherñajovsky -conocida popularmente como María Cher, a través de su marca homónima- creció visitando locales de indumentaria. La diseñadora rememora las horas de su infancia mirando vidrieras y probándose looks que, a esa edad, le quedaban grandes.
“Desde chiquita tengo una fantasía con la ropa, es algo innato. Tenía curiosidad por usar y combinar prendas y me acuerdo que conocía a los dueños de locales chiquitos ubicados Avenida Coronel Díaz y Cabello que me decían ‘todavía no llegas a ponerte a eso’, hasta que un día pude vestirme con lo que me gustaba y todos mis ahorros los destinaba a eso”, recuerda.
Años más tarde, su amor por la vestimenta siguió latente, aunque como un hobby y no fue hasta los 26 años que decidió convertir su vocación en un trabajo. Al respecto, cuenta: “Luego de pasar por otras carreras, me di cuenta que era un camino interesante y profesional que tenía que ver con disciplinas del arte que había explorado”.
Así, tras un viaje por Inglaterra, en 2001 volvió a su tierra natal y gestó su primer local. Por tanto, la moda, que en principio era una pasión, devino para María en un horizonte laboral. Hoy, más de dos décadas después, es referente en la moda argentina. Además, desembarcó en el exterior, llegando a Estados Unidos y confiesa que su proyección mayor es instalarse en Europa.
A su vez, hace dos años, la empresaria lanzó “Cher mix”, una línea destinada a la juventud. Sobre esta, amplia: “Sentimos que hay un lugar para proponer cosas para la gente joven a las que María Cher, por concepto, les queda grande. Es una alternativa independiente y siempre queremos apostar a nuevos productos”.
Una forma de expresión
Los diseños de María apuntan a “mujeres de distintas edades y cuerpos, masculinas, sexys y rockeras, con distintas búsquedas pero que quieren diferenciarse, con prendas románticas, icónicas pero también clásicas” -explica-.
Y agrega: “Queremos que la gente se sienta identificada con una forma de vestirse que les dé ganas de comerse el mundo y les transmita seguridad, ilusión, magia”. Igualmente, revela que en EEUU el público es más ávido de vestidos, blusas, estampas floreadas, aunque, de todas maneras, la identidad de la marca predomina, “con gestos masculinos y del minimal moderno”.
En tanto, acerca de su inspiración para confeccionar, comenta: “Me llama la atención la vida misma, historias, décadas, artistas y una infinita cantidad de cosas”. Asimismo, ahonda en su concepción de la moda: “Es una carta de presentación, una forma de expresarse, que viene a colaborar con la personalidad de cada una”.
Modelo a seguir
Actualmente, la compañía de la empresaria se ha consolidado como un emblema y su vigencia en el mercado da cuenta del fenómeno. No obstante, Cherñajovsky confiesa que “el sostenimiento en Argentina” ha sido un desafío estos años.
De todas formas, destaca su comodidad en el ámbito empresarial, donde se desarrolla junto a su marido y socio. “Él lleva el negocio, pero en este rubro la mujer tiene un lugar muy importante”, reflexiona.
En este marco, analiza el presente del sector, en materia de igualdad, indicando que “quedan muchas cosas por alcanzar”. “Un tema que no está saldado es la maternidad. Hay regulaciones estatales y empresariales pero las mujeres tenemos que animarnos a tomar lugares y para eso necesitamos equilibrarnos con los hijos y exigir mejoras salariales”, sostiene.
Por otra parte, en cuanto a las claves que considera fundamentales para afianzar el liderazgo femenino asegura: “Tiene que ver con un modelo de trabajo, esfuerzo. Tener identidad, estilo y un equilibrio entre creatividad y capacidad que debe ser llevado a cabo en tiempo, forma, entre otros factores”. Y agrega que no debe perderse “esa sensibilidad que caracteriza a la mujer”.
Finalmente, concluye celebrando el estatus de la industria en la que se desenvuelve, a nivel nacional. “Es muy potente, con muchos diseñadores interesantes y como región no tenemos nada que envidiar, sobre todo con las condiciones que enfrentamos”, cierra.
Colección Verano 24
En su propuesta para esta temporada, María Cher presenta “textura, transparencias y más color” -en palabras de su fundadora-. Así, la idea es conservar la impronta “minimal y rockera” de la marca, añadiendo “una parte sexy y moderna”. “Vamos a encontrar mucha piel en las prendas y tratamos que sean más geométricas, destinadas a una mujer etérea y sexy”, afirma la diseñadora.